España fue país de la UE que recibió más inmigrantes en 2006

España fue el país de la UE que recibió más inmigrantes en 2006, con un total de 803.000 personas, y el cuarto con un mayor índice de inmigración (18,1 por mil habitantes), según un estudio divulgado hoy por Eurostat, la oficina estadística comunitaria.

Tras España, el segundo país de la UE con más inmigrantes fue Alemania (558.500), seguido del Reino Unido (con 451.700).

Los países de la Unión Europea recibieron un total de tres millones de inmigrantes durante 2006, lo que supone que España acogió el 26,7% del total comunitario.

Y los tres principales puntos de atracción: España, Alemania y el Reino Unido, recibieron al 60,4% del total de inmigrantes en la Unión Europea.

Ese ritmo de llegadas supuso que España recibió en ese mismo año 18,1 inmigrantes por cada 1.000 habitantes de población, lo que le sitúa en cuarto lugar entre los Veintisiete países de la UE tras Luxemburgo (28,8 por 1.000), Irlanda (19,6) y Chipre (18,7).

De los tres millones de inmigrantes, 1,8 millones (el 60% procedían de otros países comunitarios), y el resto procedían de países de fuera de la UE.

En España, el 38% de los inmigrantes llegados en 2006 procedían de países de la UE y el 62% eran extracomunitarios.

Los rumanos fueron los inmigrantes más numerosos que se instalaron en España durante 2006, con un 16% del total, seguidos de los marroquíes y bolivianos (en ambos casos, con un 10% de los llegados), los británicos (5,29%) y los colombianos (4,43%).

En la UE, los más numerosos fueron los polacos (10%), seguido de rumanos (8) y marroquíes (5%), según las cifras de Eurostat.

En 17 de los 24 países de la UE con datos disponibles, la mayoría de los llegados eran ciudadanos extracomunitarios. Eslovenia (90%), Rumanía (86%) y Portugal (84%) figuran al frente de esta categoría.

En cambio, el 84% de los llegados a Luxemburgo eran ciudadanos de un país de la UE, seguido del 77% de Irlanda y el 57% de Alemania.

Por géneros, las cifras de Eurostat indican que las mujeres emigran a una edad más temprana que los hombres (cuatro años de diferencia media, 28 a 32), diferencia que se produce tanto entre el grupo de ciudadanos comunitarios como el de fuera de la UE. Sin embargo, en España y Suecia la edad media de hombres y mujeres inmigrantes fue la misma.

Y por edades, Dinamarca acogió a los inmigrantes más jóvenes, con una media de 27,8 años, pero la edad media fue marcadamente más elevada en países del centro y este de Europa (como Eslovenia o República Checa) que han recibido sobre todo a personas procedentes de países extracomunitarios, como Bosnia o Ucrania, respectivamente.