Madre inmigrante, madre latinoamericana

Son madres inmigrantes latinoamericanas que han tenido que emigrar de sus países de origen, que han visto crecer a sus hijos por internet o que han tenido la fortuna de reencontrarse con ellos después de años de espera. En el mes de mayo la mayoría de los países de Latinoamérica se celebra el Día de la Madre, muchas de ellas se comunicaran con sus hijos haciendo uso de las nuevas tecnologías.

En España, la mayoría de los inmigrantes latinoamericanos son mujeres, algunas madres solteras o separadas, que se han abierto camino para ayudar a sus familiares e hijos. Estos son algunos relatos de madres latinas que viven en diferentes comunidades de España y que nos han enviado a través de diferentes compañeras sus relatos, sus vivencias como madre inmigrante, como madre latinoamericana.

María H. (Ecuador) - Desde que estoy en este país no celebro ninguna fiesta, porque mi vida son mis hijas y mi trabajo. Llegué a España hace diez años con mi esposo; pero después el me abandono. Pero no me rendí seguí trabajando para poder traer a mis hijas porque he vivido en un entorno muy familiar y deseaba que ellas también lo vivieran, a pesar de que su padre nos abandono. María es costurera y nos comenta que vivir en este país le ayudo a valorarse mucho como mujer y sobre todo se dio cuenta que la vida no gira alrededor de un hombre.

Clemencia T. (Colombia) - Hace mas de cinco años que no ve a sus hijos, pero se mantiene cerca de ellos porque procura siempre hablar por teléfono o conectarse a Internet. En Colombia no sabia manejar la computadora, pero cuando llegue a España, al sentir la necesidad de comunicarme con ellos, me puse a estudiar en un tiempo muy corto el manejo de la computadora y ahora soy una experta, he aprendido a manejar las redes sociales y sobre todo aprendí a buscar trabajo en internet. Sus estudios lo compatibilizo con su trabajo de cuidado de mayores y no pierde las esperanzas de regresa a su país para estar con sus hijos.

Jennifer A. (Perú) – Jeni es madre y padre a la vez. El trabajo que tenia era muy agotador, con horas intensas de trabajo sobre todo en los días de fiesta soy cocinera, pero esto no me impidió ser madre y padre, le inculque a mi hijo los valores y el respeto hacia los demás y creo que esto le sirvió porque aunque mi hijo ya no se encuentra conmigo sabe que todo lo que he hecho es correcto y lo que aprendió conmigo lo esta enseñando a mis nietas. Todo es una cadena de aprendizaje.

Estela C. (Bolivia) - No quiero regresar a Bolivia porque a mi edad ya no encontrare trabajo, aquí tengo trabajo aunque no me pagan mucho pero estoy asegurada y lo que gano es para cubrir mis necesidades básicas y para ir ahorrando un poco para poder enviar dinero a mis hijos que están en Bolivia porque dos de mis hijos se han regresado por la crisis y necesitan aun mi ayuda.

Cuatro testimonios de mujeres y como cada una de ellas tienen una forma muy particular se celebrar el “Día de la madre”, somos en este momento, un número importante de mujeres que provenimos de diferentes lugares de Latinoamérica y estamos aquí, encaminadas en un proyecto migratorio que parece “no tener un final”, pero la fuerza de seguir adelante con este proyecto son nuestras hijas e hijos.

Por lo extenso del relato, hemos creído conveniente resumir el texto y por la protección de datos solo hacemos mención del nombre de la participante.