Artículo de Manu Mediavilla aparecido en diariodeleon.es
El exceso de confianza "creen estar inmunizados y no suelen vacunarse" convierte a los inmigrantes viajeros en el grupo de mayor riesgo de adquirir enfermedades infecciosas cuando visitan en vacaciones a sus familias en zonas endémicas. Así lo subraya Miriam Navarro, especialista de la Unidad de Medicina Tropical del madrileño Hospital Ramón y Cajal, que refuerza su advertencia con el dato de un estudio a 200 de ellos: "El 30% venía con malaria".
La baja percepción de riesgo, que llevaba incluso a esos pacientes a atribuir su malestar al cambio de comida y clima más que al paludismo, hace insistir a Navarro en su alerta contra la malaria, a la que, remacha, "los bebés y las embarazadas son más vulnerables". Después de varios años en España, los inmigrantes han perdido su inmunidad, y tampoco la tienen sus hijos nacidos aquí.
De ahí la necesidad de que cuando viajen a su país de origen sigan los mismos protocolos preventivos, incluida la vacunación, de cualquier turista.
El no hacerlo pasa factura a su salud, hasta el punto de que, como dice Rogelio López-Vélez, responsable de la unidad hospitalaria, "el 85% de todas las malarias diagnosticadas en nuestra comunidad corresponde a residentes extranjeros e inmigrantes viajeros". Así lo explica el programa "Nuevos ciudadanos, nuevos pacientes" de Navarro.